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martes, 13 de junio de 2017

Cinco horas con Mariano: análisis de la corrupción



Decía Irene Montero, en su monólogo ante el teatro-parlamento "Cinco horas con Mariano", hoy, 13 de junio del 17, lo siguiente:
"Comentan que la corrupción es un problema de manzanas podridas, dando a entender dos cosas (que nada tienen que ver): La primera que es un fenómeno natural o inevitable como que salga el sol o que caiga la lluvia, la segunda es que la corrupción es un problema moral o individual, que roban las personas maleducadas con moralidad débil o pocos escrúpulos.  Pero no señorías, la corrupción no es un problema natural ni tampoco es un problema individual o moral Es un problema económico y político, estructural"
Esta señora sabe lo justo, lo superficial... a ver, lo pregunto en plan socrático ¿cree de verdad que no es inevitable la corrupción? O sea, ¿que el ser humano es naturalmente bueno? Vamos a ver ¿es que Irene María no vive en el mundo real? ¿No ves a la gente queriendo lo mejor y haciendo lo peor? ¿O es cuestión solo de la estructura? ¿Crees de verdad que la política puede acabar con el pecado? ¿Crees que con estructuras adecuadas no habría violencia, robo y mentira? Pues andas muy mal de la vista. 

¿Hay algún fenómeno "estructural" que no venga de la moralidad? ¿O es que la moralidad, la fortaleza, la templanza son irrelevantes para el desempeño de la vida pública? ¿Puedes establecer estructuras morales y garantizarte que no van a corromperse? 

Evidentemente no y este monólogo solo puede darse por dos situaciones, o una mezcla de ambas: o no se entera de lo que es la naturaleza humana y cree que el delincuente lo es siempre por el ambiente; o lo sabe muy bien y lanza este discurso con idea partidista, de mera estrategia política.

Esta inocencia falsa sobre la naturaleza humana es la raíz de todos los males del comunismo en particular y de todo totalitarismo en general. Es evidente que bajo las mismas estructuras se producen conductas diferentes y -a no ser que nos vayamos a inconscientes freudianos- es la moralidad de cada uno la que mancha o dignifica la estructura. No existe ni puede existir una estructura perfecta. La utopía es interesante como motor del cambio, pero no es lugar de llegada, porque si llegas a ella es un espejismo, porque llegas a otra realidad donde la naturaleza humana tiene que seguir siendo, con su libertad y sus carencias. 

Sí tiene razón en la descripción del problema, pero no en la causa. El corrupto genera la estructura corrupta y no al revés. No me cabe duda de que el PP es una estructura corrupta, como lo es cualquier partido; la única diferencia es que el PP durante años ha tenido mucho poder, y el poder no corrompe, pero atrae a los corruptos como la miel a las moscas.

Pero vamos al tema. Mi tesis es que la corrupción es el resultado de muchos años de mermas del espíritu. No es corrupción sacar dinero con una tarjeta de crédito sin límite que te deja un banco, de unos fondos reservados, amañar un contrato para un amigo o cobrar en negro de gobiernos extranjeros. Estas cosas son delitos. Y puede uno cometer un delito y no ser corrupto. Y se puede ser corrupto sin cometer delitos. 

El corrupto es corrupto aunque no le imputen/investiguen, aunque nunca le condenen, aunque no se dedique a la política. Hay profesores, albañiles, comerciales, curas y barberos corruptos. El corrupto es corrupto no por lo que hace, sino por lo que es: un ser con el espíritu mermado, un enano espiritual. Y eso de ser enano espiritual, a falta de un aparato que mida el espíritu (cosa que no estaría mal inventar), se puede intuir por una frase, un tono en una conversación, o una acción u omisión que solo un corrupto puede tener. Aunque la justicia no puede entrar en estas sutilidades y solo puede dedicarse a perseguir delitos, los ciudadanos pueden y deben descubrir al corrupto y compadecerse y/o guardarse de él. 

Saber si su vecino, compañero, amigo es corrupto basta ver estas señales (ojo, si se dan el 50% es corrupto seguro):

- Cómo mira y disfruta de las novedades, de los objetos de consumo
- Cómo disfruta contando sus relaciones sociales con gente conocida
- Tiene un coche de alta gama y lo mantiene siempre limpio y sin mácula
- Hace colas para tener el nuevo Iphone o va al concierto de los Rolling
- Tiene abono de la plaza de toros o del equipo de fútbol
- Viaja lejos, muy lejos, y lo cuenta siempre
- Ve en las personas del otro sexo: cuerpo, dinero y apariencia externa
- Solo ve a las personas de poder y a los demás ni les siente
- Tiene amigos, muchos amigos íntimos, que trabajan con él
- Sabe estar y adaptarse a las circunstancias, París bien vale una misa
- Tiene un pronto, que solo saca con quien puede, "es el carácter"
- Sabe mentir sin que se note
- Es campechano y sencillo en los gustos culinarios, nada de nueva cocina
- Al portero le habla de fútbol y le llama "campeón"
- Dice tacos en privado para ser más campechano: "joder", "cabrón", "joputa"
- El reloj delata al corrupto más que cualquier otra cosa(1)

Con este perfil habrán reconocido a algún corrupto en sus conocidos. Vigilen bien, no les vaya a pasar lo que le pasó a Esperanza Aguirre, que dice que pecó, "in vigilando", pero pecó de ignorancia, puesto que si hubiese leído esto habría tenido herramientas para detectar a los corruptos apadrinados. 

Como pueden ver por la descripción, el corrupto es quien vive a tope en la cresta de la ola, dispuesto a vender a su madre a cambio de un poco de apariencia, de poder, de dinero o de novedades. Por eso el corrupto es siempre inocente de los cargos que se le imputan, porque es un enfermo espiritual, se irá a la cárcel -o a algún Consejo de Administración, o a la Secretaría General de algún partido-  creyendo que era inocente y que hizo una gran labor social haciendo lo que hacía. 

La enfermedad del corrupto es de percepción: no ve lo que nosotros vemos; su culpabilidad no es del presente, es del pasado, de un pasado lejano cuando poco a poco fue cegándose y perdiendo la noción de la realidad. El corrupto es como el drogadicto, el sicario mafioso, el agresor sexual. No se les puede culpar, independientemente de que la justicia les culpe y les condene, no tienen posibilidad de reinserción ni de arrepentimiento, porque su realidad es distinta al resto. Su realidad es nada vale si uno no es el victorioso macho alfa de la manada, el elegido, el mejor y por lo tanto su moral es distinta al resto de los mortales, sus valores están transmutados. 

El corrupto se genera una imagen del triunfador, de valioso directivo, de sobrado, que se retroalimenta porque a su alrededor generan una amalgama de mediocres aduladores en espera de las migajas del corrupto. Consejeros, Secretarios, Testaferros, Asesores, Sicarios, que poseen dos características innatas: su discreción, y su capacidad para adular sin ser demasiado empalagosos. Esta capa de aduladores es necesaria para que exista el corrupto y contribuye de manera decisiva para que éste siga siendo corrupto, pues son los que se encargan del trabajo sucio y les va la vida en que su jefe siga allá arriba, donde nada le salpica. El corrupto y sus aduladores empiezan a crear esa estructura de la que hablaba Montero. 

Cuando la trama cae, normalmente por luchas internas (porque el Estado casi nunca descubre nada "de oficio"), lo que ocurre es un desvelamiento: el juez (y las filtraciones sobre todo) deja ver la cara verdadera del corrupto, la que ha estado ocultándose durante años. Este desenmascaramiento lo que produce es, al principio, estupefacción. Acostumbrados a ver una imagen positiva del corrupto, descubrimos una realidad contraria, una realidad que indica que nuestra idea previa estaba equivocada. Y entonces se produce una crisis: el relato cambia y vemos que todo lo que habíamos visto tiene una doble visión, una explicación por la corrupción y no por la imagen pública manipulada.

Como todo cambio de ideas cuesta e imaginamos que no es así, que hay algo que no sabemos, que se nos escapa: ¿Cómo el fundador de un movimiento religioso era un corrupto? ¿Cómo ese político tan autosuficiente era un ladrón compulsivo? ¿Cómo el cuñado del rey puede ser corrupto? La gente piensa -equivocadamente- que quieren más dinero o más poder, pero no es cierto; más bien al contrario: la corrupción apetece del poder para esconder el espíritu en merma.  

La pregunta que parece evidente es: ¿Cómo alguien que "lo tiene todo" arriesga su vida por dinero o poder? Pero la pregunta está mal formulada, porque ese "lo tiene todo" es pura apariencia, fruto de una enfermedad espiritual del corrupto, que se ha esforzado en la apariencia de tenerlo todo, realmente "todo" le tiene a él, y está cegado para el Todo verdadero, que es lo que realmente merece la pena. El pobre corrupto no ve belleza, verdad y bondad en la realidad; la belleza la transforma en objetos de consumo, coches de lujo, decoraciones estridentes, operaciones de estética, viajes a la otra punta del mundo, trajes, bolsos y zapatos. No hay realmente belleza, sino la belleza en sí mismos y la belleza de los suyos al estar en tan caros, queridos, escenarios y con tan exquisitos disfraces de poder. La verdad es postverdad: la verdad transformada en instrumento de manipulación de masas o en arma arrojadiza contra alguien o contra algo. La bondad tiene que ver con la eficiencia y la acción correcta, sin importar las consideraciones éticas.

El corrupto es pues un ser que ha transformado la verdadera realidad en una caricatura de ella misma. Se alimenta de un poder falso y vive intentando mantenerlo. No es que el poder corrompa, sino que el poder es apetecido por el que comienza en el vértigo de la corrupción, y cada vez que acapara más poder se vuelve más corrupto, más ciego.

La corrupción es el resultado de un vértigo, una atracción por la propia destrucción espiritual, que como todo vértigo destruye el espíritu y se queda en los superficial, en una realidad deformada. Por eso hay que agradecer a la justicia que de vez en cuando nos desenmascare a algún corrupto público, porque así podemos saber que es la corrupción una amenaza real para toda persona.

La corrupción no es enfermedad de la política ni de la vida pública, está en todos los lados, en todos los estratos sociales, no es cosa de estructuras ni tramas, como dice la primera dama de la oposición, es cosa del espíritu en destrucción constante, en un vértigo.


(1) Pueden complementarse con las nueve señales del hijoputa, que C.J. Cela expuso magistralmente en Mazurca para dos muertos. Pero -ojo- no todos los hijoputas son corruptos.

lunes, 23 de diciembre de 2013

Feliz Navidad ¿virtual o real?


El término virtual viene a ser lo que tiene virtud para producir un efecto, que parece real, pero no lo es, o más exactamente, no lo es del todo, necesita de otros para ser perfectamente real.

La realidad no es lo que vemos, ni siquiera es lo que podemos ver de algún modo, aunque no lo podamos ver ahora. Tampoco es lo que podemos medir, lo que impresiona nuestros aparatos de medida, etc. No, eso no es la realidad, es una parte de la misma. 

La realidad es más de lo que aparece. La realidad está más allá de las cosas que vemos, éstas nos indican qué es la realidad, apuntan a ella, pero si no aprendemos a ver más allá de las cosas aparentes no veremos nada.  Es como estar presente en un cine, pero sin enterarnos de qué va la película. 

Ver: ésa es la clave, experimentar de verdad la realidad es lo que nos da sentido, por ejemplo en este cuadro de EL Greco hay tres realidades sin las cuales no se entiende nada de nada. Sin la realidad empírea, celeste, no hay cuadro, o el cuadro sería una escena costumbrista sin importancia. 

Recortar el cuadro en busca de "lo esencial" equivale a quitarle realidad al hecho histórico, porque la "gracia" del cuadro, la gracia de lo que pasó en Belén, es decir, la realidad que muestra no es otra que la encarnación del hijo de Dios, por eso el cuadro no se puede romper sin romper la realidad, no se debe obviar lo que pasa en el cielo, porque sin ello lo que pasa por aquí no tiene importancia. 

Lo importe del cuadro está arriba y abajo, no en el centro. Hay que saber mirar. Arriba tenemos dos ángeles que se parecen un poco a los pastores: 



Y debajo está casi lo más importante: el pastor arrodillado, porque si en el cielo hay fiesta y se baila y en la Tierra a nadie le importa, y nadie se entera, pues no sería muy de recibo. Tampoco lo sería estar como si nada hubiese pasado y sí.


Así que el cuadro es completo y muestra la realidad auténtica: el hombre de rodillas, los ángeles cantando y haciendo cantar a todos para darles una realidad que no tendrían.

La realidad del portal de Belén solo se explica en estos tres planos, como la realidad de cada uno. Eso sí cada uno, quod naturam non dat, ve lo que puede.

En definitiva: felíz Navidad

viernes, 27 de septiembre de 2013

El cerebro construye la realidad

Kia Nobre con Punset

¿Realmente el Cerebro construye la realidad? 303 años después de la publicación del Tratado y 300 de los Tres diálogos de Berkeley nos vienen, desde la ciencia más pura a decirnos, ni más ni menos, que la realidad la construimos.






Minuto 12. 34. 


Eduardo Punset: El mundo exterior ¿es real?, ¿es tal y como lo vemos? (...) 

Kia Nobre: Sí. No cabe duda de que la realidad es distinta a cómo la vemos. Cuando empecé en esa profesión era  100% materialista y de hecho sigo pensando que el cerebro nos dice muchas cosas sobre nuestro comportamiento,  pero cuando nos centramos en esa verdad final, es decir, en qué hay ahí fuera, en el mundo real, la pregunta es "sesuda" . He tenido la suerte de casarme con un filósofo, por eso en casa me recuerdan constantemente - como decimos en Brasil - que el agujero es algo más profundo, ya sabes, las cosas son complicadas, y al fin y al cabo puede ser que el mundo no sea nada como lo que percibimos conscientemente... (...) DIRÍA QUE HAY UN MUNDO AHÍ FUERA PERO NO CREO QUE PUEDA PROBÁRTELO 


Dos preguntas: ¿Cómo es que la doctora Nobre relaciona el materialismo con la afirmación de que la realidad es distinta de cómo la vemos? ¿Qué es el tiempo? ¿Qué es el éxodo de la realidad? ¿Podemos probar que la realidad es como es? ¿Y que no es como es? 

Kia Nobre
Empirismo y magia

martes, 12 de marzo de 2013

El 10% se va a la calle

Dos duermen mientras les mira una obra de Ron Mueck

¿Dónde está la bomba que destripe
el terrón maldito de España? 
Máximo Estrella


En todo grupo humano suficientemente numeroso hay un 10% malo (y un 10% bueno). Campana de Gauss, o de Perogrullo. Porque si eliminas los extremos tendrás otros extremos, y así sucesivamente.

El mal gobernante sueña con poder mandar al exilio a unos cuantos opositores radicales; el mal empresario con despedir a ese 10% malo de su empresa que se creen que nada puede pasarles por no cumplir. El mal profesor con eliminar al 10% de alumnos vagos. Pero no es nunca la solución: rápidamente vuelve el 10% malo, esta vez con otras caras, pero sigue existiendo.

El gobernante, el empresario o el profesor debe poner los medios para que ese 10%, aún estando, sea capaz de callarse, de trabajar, de ser motivado por el resto. Para ello primero tienen que tener las estructuras saneadas: debe poder tomar decisiones. El empresario que está atado por los sindicatos debe, en primer lugar minimizar su influencia; el profesor debe tener el apoyo incondicional de las autoridades académicas o de los padres y el gobernante de los votos. Sólo cuando las estructuras están saneadas, si persiste el problema, puede uno despedir a los molestos, porque si no lo hace así, si se despide para sanear se entra en una espiral de clima negativo, de miedo, que sólo puede volverse contra el directivo.

Lo que es de idiotas es pensar que quedará solucionado el problema por eliminar al 10% problemático, sin antes cambiar las estructuras; porque las estructuras son las que permiten que esos sigan y se crean intocables.  

Esto, que es tan sencillo, cada vez lo oigo menos, pero -gracias a la crisis- cada vez veo más ineptos que esperan solucionar sus problemas despidiendo a ese 10%... 

Resumiendo: 

1. Seleccione el problema estructural
2. Limpie las estructuras
3. Observe las reacciones
4. Limpie, si no queda más remedio al 10% indeseable

lunes, 15 de octubre de 2012

Twitter: un medio hablado y escrito

Twitter es un medio que transmite información muy variada e instantánea de uno a unos pocos.

E -----> RRRR
El emisor es un perfil, los receptores son los seguidores (followers, FW), pudiendo ampliarse el radio de acción de los FW propios a los FW de FW, por medio del retweet (RT, o envío del twitt de uno a tus seguidores) o a cualquier usuario que se lo encuentre por medio del Hashtag (palabra precedidad de # que sirve, precisamente, para ser encontrado un tema).

E -----> RRRR (RR[R--->(RR---->(RRRR)RRRR)]RRRRRRRRRR), etc.

Es decir, radio de acción íntimo (los seguidores suelen rondar los 50), pero ampliable hacia lo público (hay 800.000.000 de usuarios).

La confusión está aquí: en que es de uso privado pero de acceso público, y por ello genera a veces malas vibraciones en quienes no comprenden bien los nuevos usos de las tecnologías de la información y por lo tanto las usan como si fuesen las antiguas, pensando en lo privado y lo público con las categorías de antes.

Twitter es más medio de comunicación que red social, cada vez más la gente lo usa como medio de información sobre las noticias nacionales e internacionales, a la vez que se informa de los viajes de sus amigos o de qué ver en el cine esa semana. La mezcla de lo personal con lo social es la clave de Twitter, y de su éxito. Pero además de informarse Twitter genera ya una interpretación del mundo particular, por así decirlo votada por los usuarios, que favorecen lo ingenioso, escandaloso, novedoso por encima de los criterios de calidad de la información que supuestamente tienen los medios tradicionales.
Twitter sirve para todo. Para exponer estados de ánimo ("estoy muuuy cansada!!! me voy a la cama"); opiniones políticas ("Basta ya de corrupción!!! #tomalacalle"); anuncios ("¿alguien quier alquilar un pinganillo? 50 € hora. Enviarme MD pls"); noticias falsas (el tópico "Fidel Castro ha muerto") o simplemente para resaltar lo que se ha leído o visto, o una frase que se quiere escribir "al mundo".
Por dar argumentos a los demonizadores Twitter es usado para enviar noticias falsas, para difundir rumores, para atacar a personas de la vida real, para espiar a la competencia, etc. sin que esto signifique que en sí sea un mal medio, Twitter es como es, pero como nosotros somos como somos... 
La diferencia entre escribir "al mundo" o a "mi" mundo es un tanto sutil si tenemos en cuenta que Twitter lo utilizan 800 millones de personas que envían 65 millones de Twitts por día.

Por pura lógica 65 millones de frases cortas no pueden ser importantes ni relevantes para nada. Como la vida misma: los millones de mediocres pierden su tiempo charloteando de nada o mirando(se). Nada nuevo. Y para darle un toque académico pongamos estadísticas sobre lo que se pía:
·  Cháchara sin sentido – 40%
·  Conversaciones – 38%
·  Retweets (RT) o mensajes repetidos – 9%
·  Autopromoción – 6%
·  Mensajes basura (spam) – 4%
·  Noticias – 4%
La fuente es la consultora de análisis (de pago) Pear, y por lo tanto (por el pago) ignoro las tripas del estudio y la diferencia entre "cháchara sin sentido" y "conversaciones", sumando ambas podemos decir: banalidades: 78%. Y también discrepo con ese 4% para "noticias" (como si las "noticias" no pudiesen ser cháchara sin sentido, autopormoción o mensajes basura... se ve que los de Pear no leen prensa en España).

Realmente no es para escandalizarse o para abandonarlo por completo. El metro y los autobuses de Madrid acogen a 22 de millones de pasajeros diarios. Muchos pasan por el metro en silencio, oyendo lo que dicen otros, mirándose. Otros charlotean. Cháchara sin sentido, a veces se cuentan cosas importantes, pero poas veces. Pueden oir la conversación de al lado durante un rato, leen otras cosas, etc. Muy similar. Sólo se salva que lo que se dice vuela,  no se queda como en Twitter unos días en el aire.
,
Lo peligroso de Twitter es que es lenguaje hablado pero escrito. Un medio volandero y limitado a un radio de acción casi nulo que puede ampiarse de forma artificial al poder ser impreso y elevado a audiencia máxima, traspasando las barreras propias.

Es como si pudiésemos escuchar las millones de conversaciones y filtrarlas por persona, por palabra, por pensamiento... y buscar al disidente o al enemigo para atacarle, o al correligionario para hacerle homenajes.
Lo dicho: bien usado es poco práctico, de poca acción. Mal usado es una bomba. Ojo, pues con lo que se pía.

miércoles, 13 de junio de 2012

Sois todos muy majos

Es muy fácil hacer frases sobre una generación, un país o una raza, pero es una forma de falsear la realidad. Porque una cosa es que se detecten tendencias, modas, vigencias, en generaciones, razas, pueblos, y otra distinta es que se pueda etiquetar a una gran cantidad de población con un vicio o una virtud a partir de unos pocos ejemplares.

Pero inconscientemente manipulamos. Inconscientemente identificamos a toda una raza, o un país, o una generación con lo bueno o lo malo que percibimos en algunos de esos miembros. Ejemplos en el lenguaje diario hay mil: "los chinos son trabajadores", "las rumanas limpian muy bien", "los jóvenes están hartos de los políticos", "la derecha/izquierda es mentirosa".

Chinos hay 1.000.000.000, por lo menos, y aquí en España unos 100.000, puedes conocer a unos 100 y de lejos, vamos que nunca has hablado más que con uno o dos y sin embargo colocas un adjetivo que aplicas a mil millones de personas. No digamos con las rumanas o los jóvenes.

A esto se llama (o lo llamo yo) universalización ilegítima, que consiste en hacer pasar por ley una mera conjetura que no alcanza ni el rango de hipótesis de trabajo, porque ni siquiera quiere ser probada ni contrastada. Es una hipótesis precientífica, ancestral, de pueblo, intrahistórica. Se utiliza para llenar un vacío de conocimiento, o para mover al odio o al amor hacia un grupo determinado a un auditorio. Adquiere el carácter pseudocientífico del refrán, el dicho, el prejuicio asentado, etc. Y a todo el mundo le da igual cuando se trata de hacer la pelota a un gran número de personas:

- "Los jóvenes son muy inteligentes"
- "Las mujeres pueden hacer dos o tres cosas a la vez"
- "Esta es la generación más preparada de la historia"

Es evidente que los jóvenes, como los niños, maduros o los viejos, son unos muy inteligentes y otros muy estúpidos. Primando la mediocridad, a la que estadísticamente está condenado el ser humano desde que comió la manzana.


Ahora bien, hay una universalización  legítima que consiste en encontrar caracteres propios y universales del ser humano en cuanto tal (la inteligencia, por ejemplo) y de cada época, clase, raza, sexo, cultura. Son muy pocos, pero necesarios para identificar las épocas, razas, sexos, culturas desde el punto de vista de las ideas, es decir, más allá de lo morfológico.

viernes, 29 de abril de 2011

Dos biografías de Wittgenstein (II)

Biografía 2.


Esta sí, apta para la selectividad. (Biografía falseada y políticamente correcta)


Ludwig Wittgenstein (Viena 1889) hijo de Karl y Leopoldine Wittgenstein. Nació en una familia rica e influyente.


Sus abuelos eran antiguos judíos convertidos al protestantismo. Su padre era un industrial que controlaba todos los recursos del hierro y del acero del imperio. Fue uno de los hombres más ricos de su tiempo, incluso salvó su fortuna de la gran depresión colocándola en buenos valores.


Su madre estaba emparentada con el nobel de física Friedrich Hayek. A pesar de la conversión al protestantismo de sus abuelos paternos, Ludwig fue bautizado como católico romano —la fe de su abuela materna— y recibió un entierro católico.


Ludwig creció en un hogar ideal para las artes. Sus padres eran aficionados a la música. El hermano mayor Paul, se convirtió en un pianista de fama mundial. La casa de los Wittgenstein atraía a gente culta, especialmente a los músicos y pintores, pero también a intelectuales. La familia recibía visitas frecuentes de artistas como Gustav Mahler. Toda la educación musical de Ludwig sería muy importante para él. Incluso utilizó ejemplos musicales en sus escritos filosóficos.


Estudió ingeniería en Manchester donde diseñaba motores de aviones. En esta época y en inglés leyó a Russell y Frege.


En 1911 conoció personalmente a Frege, a Russell a G. E. Moore y a Keynes.


Dos años más tarde sufre una crisis y se aísla en una cabaña en Noruega hasta el principio de la primera guerra mundial. Vuelve al mundo y se alista en la artillería austriaca, fue condecorado, y hecho prisionero por el ejército italiano. Durante este tiempo escribe el Tractatus, obra que no logra publicar hasta 1922.


Renuncia a la fortuna de su padre y a la filosofía, y se hace maestro para enseñar en distintos pueblos de Austria.


Más tarde (en 1926) abandona la docencia para hacerse jardinero en un convento, pero una nueva crisis le hace también abandonar su nueva profesión y vuelve al mundo de la filosofía con ideas nuevas. Es ahora cuando entabla contacto con el círculo de Viena (Moritz Schlick, Carnap, Waisman y Herbert Feigl).


Vuelve a Cambridge para continuar sus investigaciones, obtine el grado de doctor en 1929 y será profesor al año siguiente del Trinity College, y allí ejerció la docencia hasta 1935. Su vida consistía en ir al cine y leer novelas de intriga. Mientras sus alumnos recopilan los apuntes de clase y les dan forma, gracias a ellos tenemos El Cuaderno Azul y El Cuaderno Marrón que son los dos libros representativos del “segundo Witgenstein”.


Vuelve a la cabaña de Noruega en 1935. En 1937 vuelve a Cambridge y los alumnos vuelven a hacer un libro (póstumo) con sus apuntes: Lecturas y conversaciones sobre estética, psicología y religión, que se publicará en 1966.


Al estallar la guerra se hace enfermero, renuncia definitivamente a la docencia y se va a Irlanda a una casa de campo, donde termina su último libro Philosophische Untersuchungen que no fue publicado hasta 1953.


En 1941 se le diagnosticó un cáncer de próstata murió el 29 de abril de 1951, tal día como hoy, en Cambridge. Dicen que sus últimas palabras fueron: “¡Decidles que he tenido una vida maravillosa!”

Dos biografías de Wittgenstein (I)

Biografía Proscrita (no leer si uno va a examinarse de selectividad)


Wittgenstein vivió una vida crítica y destructiva. Su personalidad era patológica. Su filosofía no es más que el síntoma de esa pésima instalación en la vida.


El suicidio de tres de sus (cuatro) hermanos varones quizá sea la causa de sus males. O el no haber aceptado los cambios que sufría su familia (judíos que se hacen cristianos, pobres que se hacen ricos...). Se mostraba especialmente violento, en especial con las niñas (dicen que tiraba del pelo con tal fuerza que arrancaba mechones enteros, daba palizas tales que dejaban inconscientes a sus compañeros). Durante su infancia fue partícipe de tres ataques muy violentos contra niños de su edad. Tan violentos fueron que dejaron honda huella entre sus convecinos y han podido, sesenta años después, ser relatados y pasar a las biografías.


Contaba como compañeros de juegos a un tal Adolf, de carácter similar, aunque éste último menos violento. De mayores casi destruyen la vieja Europa, uno en teoría y el otro en la práctica, porque la "filosofía" de Wittgenstein, es precisamente eso: un intento de demoler la filosofía, la ética y la cultura de Occidente, un conjunto de falacias al servicio de la irracionalidad.


Quizá las depresiones periódicas, su carácter violento, sus diferentes culturas no asimiladas, su desviación en la conducta o su genética (o una combinación de todo lo anterior) le llevaron a tener una tendencia suicida durante toda su vida y a un aislamiento cada vez más inhumano.


En su trato personal era un perfecto idiota, en vez de promocionar o intentar mejorar a sus estudiantes los machacaba, los humillaba, logrando que muchos abandonasen sus estudios y se dedicasen al trabajo manual. Con sus compañeros era igualmente implacable y maleducado, llenando las frías salas de Cambridge, donde reina el estudio y la humildad, de gritos y aspavientos. Pensaba que nadie estaba a su altura, que a un lado estaba el mundo y a otro él. Impregnado de ese hybris griego, esa soberbia del loco que piensa que su idea es la única aceptable.


Parte de su desprecio al género humano era su manera de escribir críptica y oscura, para que nadie lo entendiese (de hecho, en la correspondencia con Russell afirma que el Tractatus "nadie lo entenderá).


Su trabajo fue recibido como un texto sagrado en el Círculo de Viena, sus discusiones acaloradas (callaba a gritos a los eminentísimos profesores) hasta que logró enemistarse con todos, uno a uno (eso sí, después de haber logrado sus objetivos "filosóficos", es decir, que sea tomado en cuenta...). En su ataque a todo el mundo llega incluso a enemistarse con él mismo, puesto que a partir de una crisis y un intento de suicidio se desdice de todo lo dicho, por eso sus adeptos filósofos distinguen entre dos Wittgenstein: el primero y el segundo.



[Lo realmente patético es que este autor forme parte de la selección de los 12 autores más importantes de la Historia de la filosofía para las universidades de Madrid, cuando NINGÚN historiador de la filosofía le da ese carácter de gran filósofo, más bien es siempre tratado como una anécdota, un intento fallido más de destruir la metafísica. Lo realmente importante es que a pesar de Winttgenstein y de los demás enterradores de la filosofía, ésta sigue viva]

miércoles, 23 de febrero de 2011

Una "anécdota" sobre la vida de Carlos Marx


Los biógrafos marxistas que escriben sobre Marx tienen la poco profesional y para nada ética costumbre de “obviar” los detalles de su vida privada, no porque estos sean irrelevantes sino porque son tan macabros y desagradables que escribiendo sobre ellos temen herir su ideología. Sabido es el maltrato que Marx propinó a sus tres hijas, de hecho se negó a pagarles los estudios y llevó a que dos de éstas se quitaron la vida tras años de soportar reiterados abusos potenciados por el alcoholismo de su padre. Tristemente, de los abusos sufridos por Helene Demuth su “secretaria” poco se sabe popularmente.

Definitivamente si nos enteramos que un hombre el cual se llenó la boca hablando de expropiaciones y explotación capitalista tuvo una sirvienta a la cual nunca le pagó un solo suelo, y que tras embarazarla cobardemente hizo pasar por padre de la criatura a un amigo, en la cabeza nos repicará con un tintineo aguijoneante la palabra hipócrita. No estaríamos equivocados, ya que lamentablemente la vida de Helene fue muy triste.


Freddy Demuth, el hijo bastardo de Marx con Helene


Nacida en una familia de Saarland un 31 de Diciembre de 1820 de jovencita comenzó a trabajar como criada de varias familias hasta llegar a la casa de los Marx, con los cuales posteriormente se mudó a Londres. La situación social de Helene no era muy buena, de hecho sus servicios no se pagaban con dinero sino que, por órdenes del padre del comunismo, se le daba solo lo indispensable y un techo… ciertamente Helene vivía en una situación servil comparable a la de un sirviente liberto romano. Para el año 1851 -no se sabe si a partir de una relación consensuada o de una violación- Helene da a luz un niño, Frederick Demuth. Ante la sospechosa “casualidad” que naciera un niño a una mujer que prácticamente no tenía vida social todas las miradas cayeron sobre Marx, quien en vez de hacerse cargo obligó a su ricachón amigo, Engels, el mismo que pagaba sus vicios, a reconocer al niño como propio.

Poco se sabe de la relación entre ambos ya que Marx siempre negó la paternidad. De todas maneras, gracias a una carta escrita por Louise Freyberger a August Bebel fechada en el año 1898, sabemos que Marx no solo no reconoció al joven, sino que además lo despreció y constantemente basureó.


Semejante secreto carcomería la conciencia de Engels, quien en su lecho de muerte, ya sin casi poder hablar, confesaría a Eleanor, la hija menor de Marx, la verdad sobre el origen bastardo de Frederick Demuth.


¿Qué es lo irónico de esto? Marx siempre deseó hijos varones, de hecho son sabidos los desprecios que propinó a su mujer durante el mismo parto al enterarse el sexo de sus hijas, llegando a decir en el nacimiento de la primera “Mi esposa dio a luz un bebé; desgraciadamente ésta es una niña y no un niño”..

El texto es de http://www.anfrix.com/2007/04/helene-demuth-la-esclava-de-marx/

No es para hacer una biografía, pero da que pensar sobre el igualitarismo feminista...

También vale el artículo de Carey Roberts sobre el tema, donde se puede leer:

Karl Marx also viewed women as effective agitators to overthrow capitalism. As he admitted in a 1868 letter, "major social transformations are impossible without ferment among the women."

But if there are any lingering doubts about Karl Marx's real attitudes towards women, just examine his personal life.

According to Joshua Muravchik's brilliant book, Heaven on Earth, Marx disdained the responsibilities of a husband and father of three girls. He was inept in managing the household finances. He never even tried to get a job. Instead, he lived off of his inheritance and a monthly stipend from Engels.

Nonetheless, Marx did indulge in the bourgeoisie custom of hiring a household maid. Her name was Helene Demuth.

In 1851, Demuth bore an illegitimate son, Henry. Federick Engels soon admitted his paternity.

Lying on his deathbed in 1895, no longer able to speak, Engels took a chalk and slate in hand to reveal a well-guarded secret. The father of the bastard-son was Karl Marx himself.

Fuente original, el libro de Muravchik: